Skip to main content

El martes arrancaba la vuelta de los cuartos de final con la remontada 'in extremis' del Valencia ante el Getafe. Los de Marcelino, que tras el gol tempranero de Jorge Molina necesitaban tres tantos para dar la vuelta a la eliminatoria, consiguieron la hazaña con un hat-trick de Rodrigo, que empató el partido en el minuto 60 y certificó la machada en el 92 y en el 94, sentenciando a los azulones.

Si el primer partido había deparado emociones fuertes a todos los aficionados al fútbol, el duelo que abría la jornada de ayer entre el Real Betis y el RCD Espanyol en el Benito Villamarín no iba a ser menos. Después del empate a uno en Cornellá, los goles de Leo Baptistao y Giovanni Lo Celso mandaban la eliminatoria a la prórroga, donde el Betis, con uno más por la expulsión de Marc Roca, fue notablemente superior y se impuso a los catalanes por tres goles a uno.

real-betis-v-espanyol-copa-del-rey-quarter-final-5c52f16e24ad031b35000002.jpg

Tras ellos llegaba el plato fuerte del día, el FC Barcelona se enfrentaba al Sevilla tras la derrota por dos goles a cero en el Sánchez Oizjuán y necesitaba tres goles para voltear la eliminatoria y no despedirse de la Copa del Rey, aunque a algún futbolista culé no le importaría. La emoción estaba servida y lo que sucedió durante la primera mitad sobre el terreno de juego acrecentó el tinte de gran noche que se presagiaba en el Camp Nou.

Los blaugranas se adelantaron con un tanto  de Coutinho tras un discutido penalti y a continuación Ever Banega falló desde la pena máxima el empate. A partir de ahí el FC Barcelona fue una apisonadora, subió el segundo al marcador, y el tercero y el cuarto en tan solo dos minutos, para dar la vuelta a la emiminatoria. El Sevilla consiguió anotar un tanto para meter el miedo en el cuerpo a los culés, que se deshicieron de los temores con otros dos goles al filo del pitido final del árbitro.

Dos goles estos últimos que condenaban al Sevilla a la eliminación y que sus vecinos del Betis vivieron aún en el vestuario. Joaquín recibió la noticia del quinto tanto azulgrana en plenas declaraciones en zona mixta, allí se mostró serio asegurando que no pensaban en eso y halagando al club rival, mientras de fondo se escuchaba a sus compañeros celebrar el gol de Luis Suárez. Segundos después las cámaras graban en audio la llegada del capitán bético al vestuario, justo cuando cae el sexto tanto culé, y entre una nueva celebración verdiblanca se escucha un: "A mamarla" del segundos antes sereno Joaquín.

Unas imágenes que sacaron a la luz y comentaron en el programa El Chiringuito de Jugones que dirige Josep Pedrerol y en el que las risas eran más que las caras serias. Cristobal Soria, el colaborador más sevillista del programa, era el único que mostraba su enfado por la eliminación de su equipo y por la reacción, en parte lógica, de los jugadores del máximo rival.