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Mauro Icardi está pasando por una situación muy complicada en el Inter de Milán. El conjunto italiano le ha retirado la capitanía y podría quedarse fuera de los próximos partidos, todo a raíz de los problemas que está teniendo a la hora de llevar a cabo su renovación. Y es que su actual mujer y a la vez representante, Wanda Nara, no para de lanzar mensajes contradictorios en los medios de comunicación.

Las últimas declaraciones en contra del entrenador Spalletti, dejando caer que el estilo del técnico no favorece al juego de su esposo, fueron la gota que colmó el vaso. Lo cierto es que no es la primera vez ni será la última que Wanda Nara provoca un lío con Icardi como protagonista y ese es precisamente el motivo por el que no se ha llegado a producir su fichaje por el Real Madrid.

El club merengue tenía al delantero en su agenda desde hace varias temporadas. Los técnicos del Madrid están seguros de que el jugador tiene condiciones de sobra para ser delantero titular en el equipo. Sin embargo, en el seno de la entidad merengue no las tenían todas consigo precisamente por el entorno del futbolista. Finalmente los problemas que ha tenido Wanda Nara en el pasado terminaron por echar atrás el fichaje, y ha quedado demostrado que ha sido un acierto y que al Madrid no le faltó razón.

La problemática modelo argentina fue la protagonista del triángulo amoroso entre ella, Icardi y Maxi López que acabó con la enemistad de estos dos futbolistas. Tampoco es muy buena su relación con su familia política, tal y como se ha encargado de revelar la hermana de Icardi en las redes sociales recientemente.

Lo que le faltaba al Madrid, que pensará Florentino Pérez en estos momentos. Si en Italia va a polémica por día, en la capital española Wanda Nara ocuparía las portadas de todos los periódicos. Sus idas y venidas y sus diferencias con la directiva sin duda perjudicarían la paz de la plantilla y terminarían por afectar al rendimiento del jugador.

Si todavía existe una posibilidad de que Icardi fiche por el Real Madrid, esa pasaría porque el ariete apartase a Wanda Nara de sus funciones como representante y se buscara un agente nuevo. Una persona que no vaya hablando y criticando de su equipo y que mantuviese la discreción con los temas que se deben quedar dentro del vestuario y de los despachos. Está claro que mientras sea Wanda Nara la que lleve las riendas de su carrera, Icardi no dará ese paso que le falta para fichar por uno de los mejores clubes del mundo y convertirse en el mejor delantero centro.