Lo bueno, lo malo y lo feo de la victoria del Atlético de Madrid contra el Leganés

El Atlético de Madrid salió con siete cambios respecto a su último once. Los de Simeone no tuvieron un buen partido, pero terminaron ganando gracias a un gol de Saúl, que salió en la segunda mitad.

LO BUENO: victoria y portería a cero

Gonzalo Arroyo Moreno/GettyImages

No fue un partido del que Simeone pueda sacar bastantes conclusiones positivas. El Atlético de Madrid sobrevivió y resistió. Marcó por un gol de Saúl, de rechace tras fallar un penalti cometido por Correa, y consiguió dejar su portería a cero. Un larguero de Thomas y poco más durante los noventa minutos. Suponemos que la mejor conclusión del técnico será que, pese a estar repleto de los menos habituales, el equipo fue un bloque, estuvo cohesionado y se mantuvo sólido. Portería a cero y tres puntos para seguir luchando por el campeonato liguero.

LO MALO: la primera parte

Gonzalo Arroyo Moreno/GettyImages

Los suplentes no funcionaron en la primera mitad. Simeone salió con un once poco reconocible en el que faltaban los más habituales. Arias, Savic, Andrés Solano, Vitolo, Kalinic… nombres de jugadores poco habituales que debían salir a demostrar que quieren ganarse el puesto desde el minuto uno pero que no lo hicieron hasta el 45. La primera mitad fue soporífera, los pepineros se contentaban con el empate y los del Atlético de Madrid necesitaban poner, como mínimo, tres marchas más. Juego lento y sin ocasiones que puso nervioso a Simeone y al Metropolitano. Tras el descanso, Simeone realizó dos cambios.

LO FEO: Andrés Solano, ¿señalado?

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Simeone volvió a darle la oportunidad al canterano en el lateral izquierdo. Sin embargo, en el descanso, el técnico decidió que el lateral se quedara en el banquillo y poner a Saúl de parche en su posición. En la segunda parte volvió a dar un cambio a la posición con la entrada de Juanfran Torres. El canterano solo jugó la primera parte de la que ya hablamos en el anterior apartado.