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Esta noche el Olympique de Lyon tratará de dar la campanada, como ya han hecho Ajax , Juventus United, buscando la victoria en el Camp Nou ante el FC Barcelona y pasando así a cuartos de final. Para ello, deberá hacer frente a una estadística poco halagüeña para los equipos franceses en Can Barça.

Y es que de los 13 partidos que ha jugado el conjunto catalán ante equipos franceses en su estadio en competiciones europeas, solamente ha perdido uno. Sorprendentemente, el único rival galo que ha sido capaz de salir victorioso del Camp Nou ha sido el Metz. Ocurrió durante la Recopa de la temporada 1984/85. 

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En aquella ocasión, los visitantes remontaron el gol inicial del Lobo Carrasco para conseguir un abultado marcador de 1-4, y de esa manera darle la vuelta a la eliminatoria, ya que en la ida el conjunto catalán se había impuesto por 2-4. El héroe del Metz fue el esloveno de nacimiento Kurbos, que anotó un 'hat-trick', marcando el último gol en el minuto 85 y echando así un jarro de agua fría sobre los aficionados culés.


El exjugador del Metz en aquella temporada, Vincent Bracigliano, explica con una metáfora lo que sintió: "Al acabar el partido, los jugadores del Barcelona salían con sus Porsche y Ferrari, mientras nosotros llevábamos Citroën 2CV y Renault. Era como si un Citroën 2CV hubiera ganado a un Ferrari"

Lo cierto es que de aquello han pasado más de 30 años, y ningún conjunto de la Ligue 1 ha sido capaz de volver a derrotar al Barcelona en su campo. El propio Olympique de Lyon ha disputado tres partidos, y en todos acabó derrotado (2-0, 3-0, 5-2). Además del Mónaco, que perdió en la temporada 1993/94 por 2-0, el otro equipo que ha sido incapaz de sacar algo positivo del Camp Nou ha sido el Paris Saint Germain. 


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Los de la capital francesa se han enfrentado a los culés hasta en cuatro ocasiones en Barcelona en los últimos seis años, y en todas han salido escaldados. Tras un empate en 2013 (1-1) que no les valió para clasificarse, en la temporada 2014-2015 llegaron dos derrotas, una en fase de grupos (3-1) y otra en cuartos de final (2-0) que les costó la eliminación, en una temporada en la que el Barcelona fue campeón de la Champions League


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No obstante, la derrota más dolorosa de un equipo francés se produjo en 2017. El PSG había ganado el duelo de ida de octavos de final con un contundente 4-0, desplegando un fútbol vertiginoso y maniatando al centro del campo del equipo español. Sin embargo, en la vuelta, los nervios se apoderaron del campeón francés, que vieron cómo su rival, liderado por un estelar Neymar autor de dos goles, remontaban la eliminatoria con un aplastante 6-1. El último gol, de Sergi Roberto, llegaba en la última jugada y suponía prácticamente la sentencia de Emery en el banquillo parisino.