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Después de cinco años la Academiavolvió a levantar una copa. Los jugadores y toda la familia de Avellaneda están iluminados de algarabía. Las redes sociales dieron cuenta de los festejos.

El empate cosechado ante Tigreen Victoria y el idéntico resultado de su perseguidor mas cercano, Defensa y Justicia, convirtió al Racing Club en el nuevo campeón de la Superliga. La alegría no es menor y todo comenzó en el vestuario rindiéndole honores al goleador del equipo, "Licha" Lopez. 

La fiesta luego se traslado al micro donde se entonó el hitazo del campeón: "BEBECVITA", en alusión a Darío Cvitanich. Fue su propio compañero en ataque, "Churry" Cristaldo, que se le ocurrió el apodo en referencia a una de las canciones de reggaeton del momento (Bebecita). De ahí el silogismo con el diminutivo de su apellido.

El destino final era el obelisco donde una multitud atestiguaba el idilio blanquiceleste. 

Todo el cotillón de su gente le brindó color a una noche que se extendió hasta altas horas de la madrugada. Al día siguiente era jornada laboral, pero poco importó, porque Racing es el nuevo capo del fútbol argentino.