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Una vez acabado el Mundial, toca hacer repaso. Según la compañía cervecera Budweiser, patrocinadora del evento, durante el campeonato del año pasado se utilizaron más de 3,2 millones de vasos, y para contribuir con el medio ambiente y mantener con vida el último Mundial, han empleado 50 mil de esos vasos para construir un campo de fútbol en la ciudad de Sochi. 

Claudio Materazzi fue invitado a la presentación, y dijo: "Estoy muy contento de que Budweiser comparta la idea de la preservación del legado de la FIFA World Cup y siga haciéndolo después del torneo".

El campo ha sido bautizado como 'The Budweiser ReCup Arena'. Se ha convertido en un auténtico espectáculo desde su presentación. Mide 65 por 42 metros cuadrados y el color blanco de los vasos hace que parezca que el césped está cubierto de nieve rusa.

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Aún falta por conocer para qué será utilizado este campo, pero sin duda, este campo 'rojiblanco' ha de tener una función especial.