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El FC Barcelona consiguió una victoria histórica en Old Trafford por 0-1 en la ida de cuartos de Champions League. El club blaugrana nunca había logrado ganar en este estadio y además lo hizo sin encajar ningún gol. Una hazaña que ha sido principalmente culpa de Gerard Piqué, que se marcó un auténtico partidazo en todos los aspectos ante su ex equipo en el que se hizo un hombre, tal y como el propio jugador dijo en la previa de este enfrentamiento.

Lo cierto es que a sus 32 años, Piqué ha alcanzado un nivel de madurez dentro de los terrenos de juego que sin duda le ha convertido si no en el mejor central del mundo en estos momentos, sí al menos en el más completo. 

Y es que el catalán es un defensor que va bien por arriba gracias a su 1,92 metros de estatura pero que encima es muy rápido. Ayer lo demostró ganándole en velocidad a futbolistas como Rashford o Martial y anticipándose por alto a 'torres' como Lukaku o Pogba. Llega siempre al corte en el momento adecuado porque está bien colocado y no se complica atrás.

Además, sabe salir con la pelota jugada en situaciones de presión del rival, lo cuál es importantísimo para el juego de posesión de su equipo. Y tiene mucha calidad con el balón, algo inusual para su posición, y que le hace tener bastante olfato goleador.

Hay que añadir también que una de las claves para que Piqué esté atravesando este gran momento de forma es su retiro de la selección española. El propio futbolista destacó que esos parones en los que se puede relajar con su familia le está viniendo a las mil maravillas esta temporada para rendir al nivel que está ofreciendo a estas alturas.

Piqué es fundamental en este Barça y si el equipo culé logra alzarse con el triplete va a ser, aparte de por los goles de Messi y Suárez, por las actuaciones del central en cada encuentro. No hay más que ver las estadísticas para darse cuenta. Piqué es el jugador de toda la plantilla del Barça que más minutos ha jugado, por delante de Messi e incluso de Ter Stegen. Sólo se ha perdido un encuentro de Liga, que fue el empate a cuatro ante el Villarreal, y ahí es donde más se notó la ausencia del catalán. Y es que, además de estar impresionante atrás, hace mejores a los de alrededor. No es casualidad tampoco que el Barça sea el cuarto equipo menos goleado de LaLiga con 31 goles en contra, por detrás del Atlético (21), Valencia (26) y Getafe (27).  Encima ha aportado 7 goles y 3 asistencias en todas las competiciones.

En definitiva, Gerard Piqué está pasando por una segunda juventud y a día de hoy es el central más en forma del mundo y más completo a sus 32 años. Ayer lo volvió a demostrar ante un rival de entidad como el Manchester United y si sigue así podría ser una de las claves para la consecución del deseado triplete.