Juanfran en su despedida: “Vino un vikingo y se va un indio”

Hoy, el Atlético de Madrid ha rendido su homenaje a Juanfran. El lateral derecho alicantino, tras nueve temporadas defendiendo la camiseta del Atlético de Madrid, ha decidido que era el momento de marcharse del Wanda Metropolitano. Los de Cerezo tan solo le ofrecían un año de renovación y el crevillentino buscaba algo más de estabilidad. El futbolista se despidió en rueda de prensa, en un homenaje en la que estuvieron presente su familia, compañeros y amigos, algunos ilustres exatléticos como Raúl García, Gabi o Aguilera.

La rueda de prensa comenzó con Enrique Cerezo dedicando unas palabras al futbolista. El presidente del Atlético de Madrid definió a Juanfran con dos palabras: “entrega y compromiso, desde el primer entrenamiento hasta el último”. Cerezo hizo hincapié en agradecer a Juanfran todo lo que había dado por el club tras sus 351 partidos defendiendo la elástica rojiblanca y lo valoró como una de las leyendas del club y un ejemplo a seguir para los futuros futbolistas colchoneros.

Tras las presentaciones tocó el turno de Juanfran. El lateral estaba visiblemente emocionado y en varias ocasiones le costó que le salieran las palabras. Dejó un mensaje destinado al club y a la afición, y es que “espero volver pronto, esta ha sido mi casa, han sido unos años maravillosos, los mejores de mi carrera. He vivido grandes momentos y he sufrido mucho”. Tras esto recordó sus inicios en el conjunto rojiblanco y su pasado en el Real Madrid. Allí fue donde Juanfran dejó la frase que más repercusión ha adquirido: “El otro día leía que vino un vikingo y se va un indio… y así fue, me voy como indio tras sentir la magia del Atlético, los valores y toda esa gente que me ha dejado darles todo el corazón que tengo”.

Juanfran continuó su discurso agradeciendo a todas las personas que le han apoyado durante su estancia en el Atlético de Madrid, haciendo un parón en su familia, el momento más emotivo de la despedida. “Os he llamado para estar aquí porque os tengo cariño y respeto. También a mi mamá, ojalá mi padre pudiese estar aquí y que hubiese pudiese ver lo feliz que he sido. También a mi mujer, que le debo todo, y a mi pequeñajo, ojalá puedas vestir algún día esta camiseta”.