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El Atlético de Madrid quiso homenajear a Juanfran Torres tras anunciar su despedida del club y organizó un evento que, si no fuese por Koke y Saúl, podríamos decir estuvo protagonizado al completo por ex-jugadores colchoneros. El lateral estuvo acompañado por Diego Godín y Antoine Griezmann, que ya anunciaron su marcha hace días; Raúl García, que cambió el rojiblanco de Bilbao por el de Madrid por un rato; y Gabi Fernández.

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Ellos son algunos de los máximos exponentes del exitoso equipo que ha liderado Simeone en los últimos años, pero, exceptuando a los actuales capitanes indios, ninguno de ellos vestirá el próximo curso la camiseta atlética. Sin embargo, la ocasión era merecedora del reencuentro, que sirvió también como un adiós colectivo símbolo del relevo generacional en el club.

El acto dejó sentidas declaraciones como las del propio Juanfran, que afirmó dejar el club como un verdadero indio cuando llegó siendo un vikingo, por su pasado madridista. Pero entre tanto reencuentro también se suscitó una pequeña polémica a la espera de cómo sería el saludo entre Gabi y Griezmann.

El veterano futbolista español habló hace unos días sobre la salida del francés comentando que "el fútbol es así, cada uno toma las decisiones que quiere y, como dije en su día, jugar en el Atlético de Madrid no tiene que ser una obligación, sino un orgullo". En sus palabras se notaba cierto rencor, un aire de resentimiento por la anunciada salida de uno futbolista que estaba llamado a ser estandarte atlético por muchos años pero dejaba de lado los colores.

Sin embargo, no hubo ni rastro de desprecio o animadversión entre ambos pues al encontrarse dentro del salón ambos sonrieron y se fundieron en un amistoso abrazo. Gabi, Griezmann y Godín, que estaba sentado junto a su amigo galo, mantuvieron una charla mientras el resto de asistentes se acomodaba para dar comienzo al evento, que se remató con una foto de los futbolistas allí presentes.