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El encuentro aniversario por los 20 años de la final de la Champions League de 1999 disputada en Barcelona, entre el Manchester United y el Bayern Múnich, junto a varias leyendas.

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El equipo inglés más en forma y con resto, vapuleó al conjunto teutón por 5-0. Exactamente un par de décadas después de esa épica final que el United ganó 2-1 al Bayern en los minutos finales, el triplete se sigue recordando y festejando hasta la actualidad.

Ya estoy ansioso por que llegue lo que será un día especial en el Old Trafford”, decía Sir Alex Ferguson, que regresó al banquillo de los Rojos que supo conducir durante más de dos décadas y se convirtió en el técnico más laureado en la historia. “Será una ocasión formidable para volver a ver a viejos conocidos y una excelente oportunidad para apoyar el trabajo que realiza la Fundación Manchester United”, reveló emocionado por volver a su casa.

Richard Arnold, director ejecutivo del grupo Manchester United y presidente de la Fundación, declaró: “La final frente al Bayern Munich es una noche que quedó para siempre grabada en la memoria de todos nuestros hinchas, y el que tantos de esos grandes nombres regresen al Old Trafford para celebrar el aniversario de ese logro trascendental es un magnífico testimonio en favor de la Fundación Manchester United y el trabajo que lleva a cabo en nuestra comunidad".

El partido amistoso fue todo lo contrario al recordado. Como un regreso al pasado, David Beckham, Jaap Stam, Gary Neville, Yorke, Cole, Paul Scholes volvieron al Teatro de los Sueños e hicieron de las suyas. Incluso, el propio héroe de aquella definición y actualmente técnico del Manchester, Solskjaer volvió a marcarle a los germanos.

Frente a ellos, el Bayern trajo a estrellascomo Lothar Matthaus, Stefan Effenberg, Sammy Kuffour y los brasileños Elber y Ze Roberto. A pesar de la calidad de los jugadores, el sedentarismo post retiro les pasó factura y no pudieron ni siquiera, convertir un gol.

La frutilla de la velada conmemorativa la dio el ex capitán de la selección inglesa, que desparramó por el piso al defensa contrario y liquidó el cotejo con su pegada excelsa. Lo festejó eufórico. Sus dotes técnicos siguen intactos.