El día que José Antonio Reyes se convirtió en el héroe del Real Madrid

El fallecimiento de José Antonio Reyes sacudió ayer al mundo del deporte en uno de esos días en los que se celebra una de las mayores 'fiestas del fútbol'. El jugador español, tras labrarse un nombre en algunos de los mejores equipos de España, disfrutaba de sus últimos días como profesional en el Extremadura, en la Liga 123, y fue regresando de un entrenamiento a su Utrera natal cuando sufrió el accidente que le costó la vida.

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Desde que se conoció la noticia a primera hora de la tarde del sábado los mensajes de homenaje en las redes sociales se han ido sucediendo por parte de compañeros de profesión, clubes y aficionados. El Real Madrid y sus futbolistas, varios llegaron a compartir vestuario con él, fueron algunos de los primeros en pronunciarse y no es para menos pues Reyes fue por un día el héroe del equipo.

Nos remontamos al 17 de junio de 2007, en el Santiago Bernabéu el conjunto blanco se jugaba el título de La Liga y tenía que derrotar a un Mallorca que se puso por delante en el marcador, alejando las aspiraciones madridistas. El Real Madrid de los Raúl, Van Nistelrroy, Guti o Higuaín no consiguió inquietar en exceso al rival, pero la entrada del andaluz en el segundo tiempo fue una auténtica revolución.

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Un toque le bastó a Reyes para hacer el primero tras un pase atrás de Higuaín y un sutil pase a la red superando al portero. Tras el gol el sevillano fue uno de los más participativos generando un constante peligro por su banda. Pudo ser expulsado por una entrada bastante dura y también pudo retirarse lesionado tras recibir un fuerte golpe, pero continuó sobre el terreno de juego y en el minuto 82 sentenció el choque con un gol soberbio desde la frontal del área.

El Real Madrid se convertía, gracias en gran parte a José Antonio Reyes, en campeón de liga por trigésima vez en una edición que se caracterizó por las remontadas. Los blancos recuperaban el trono español tras tres años, con Capello al mando, Marcelo en el banquillo, Victoria Beckham y Tom Cruise en la grada y un Santiago Bernabéu rendido a los pies de un futbolista al que criticaron durante toda la temporada.