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Cristiano Ronaldocumplió 34 años el pasado mes de febrero. Después de haber estado 15 años jugando para Manchester United y sobre todo para el Real Madrid, el pasado verano fichó por la Juventus de Turín. Es decir, lleva más de tres lustros jugando para los equipos más  importantes de la historia en Inglaterra, España e Italia.


A pesar de ser un jugador veterano, el portugués sigue estando en la élite del fútbol. A los 34 años no todo el mundo ha podido mantener el mismo nivel competitivo y de intensidad que mantiene el luso y con unos resultados todavía óptimos: ha ganado la liga en Italia, ha marcado más de 20 goles, ha sido el mejor de su equipo un año más y, por si fuera poco, ha llevado a Portugal a proclamarse campeón de la UEFA Nations League.


Pero, ¿dónde está realmente el mérito de Cristiano en seguir a este nivel bien pasados los 30? Es difícil de determinar, pero para hacernos una idea, podemos compararlo con dónde estaban algunos de los mejores jugadores de la historia cuando ya tenían 34 años:


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- Ronaldinho: tras haber brillado en el Barcelona y haber jugado para Milan, Flamengo y Atlético Mineiro, fichó para elQuerétaro de la liga MX


- Ronaldo: su carrera estuvo llena de éxitos y deslumbró en PSV, Barcelona, Inter de Milán o Real Madrid. Con 34 jugaba para el Corinthians. Se retiró a los 35.

- Pelé: jugó casi toda la vida en 'su' Santos, aunque con 34 años ya estaba en el Cosmos de la liga MLS.

- Cruyff: el holandés hizo historia en el Ajax y en el Barcelona, pero a los 34 era parte de Los Angels Aztecs de la NASL estadounidense.

- Maradona: tras haber hecho carrera en Europa y ser una estrella en el Barcelona o el Nápoles, regresó a Boca Juniors para pasar sus últimas dos temporadas como profesional allí.

- Zidane: como Cristiano, el que fuera su entrenador en el Real Madrid jugó entre otros para los blancos y la Juventus, pero con 34 años dijo adiós a los terrenos de juego.

Por tanto, se puede apreciar que lo que está haciendo el portugués a la edad de 34 años está a la altura de los más privilegiados. Una muestra más de la competitividad y el hambre de éxito que sigue teniendo uno de los mejores jugadores de la historia.