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El conjunto blanco confirmaba esta misma mañana que el flamante fichaje de este verano no podrá ser de la partida ante el Celta de Vigo. La afición blanca, y seguramente Zinedine Zidane, se habrá echado las manos a la cabeza tras conocer la lesión de Hazard, que mínimo le tendrá apartado del equipo unos días, pero seguramente habrá algún compañero a quien se le ha escapado una sonrisa.

El primer beneficiado de la ausencia de Eden es Vinicius, que probablemente entre en el once inicial en la posición que más le gusta, la de extremo izquierdo. El belga le ha arrebatado el puesto y le ha obligado a desplazarse a una banda derecha en la que su potencial ofensivo queda reducido y en el estreno liguero podrá demostrar de lo que es capaz si juega donde mejor se desenvuelve.

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Pero sin duda alguna el jugador que más se habrá alegrado ha sido James Rodríguez que no solo ha entrado en la convocatoria tras toda la temporada en la grada sino que, con esta baja inesperada, podría tener algunos minutos aunque fuese desde el banquillo. La salida del colombiano se antoja cada día más lejana, los medios ya dan por hecho que continuará de blanco y Zidane debe contar con él pues necesita de sus cualidades.

Con Hazard fuera de juego, Vinicius en la banda izquierda e Isco en la mediapunta, el cafetero podría entrar en los planes del técnico galo en el flanco derecho, donde puede explotar al máximo su exquisita pierna zurda. Se desconoce el alcance de la lesión del belga, pero James podría tener ante sus ojos la mejor oportunidad hasta el momento para demostrarle a 'Zizou' que es la mejor alternativa que tiene en el equipo para cubrir un espacio que necesita un especialista de nivel con urgencia.

El doble pivote con el que Zidane ha trabajado durante la pretemporada obliga al francés a tener a un hombre capaz de incorporarse por la banda derecha, regatear, apurar la línea de fondo para centrar y apoyar al lateral. James Rodríguez es el futbolista perfecto para esa labor, un jugador que, si no estuviese en el Real Madrid, estaría en la agenda y Florentino lucharía por hacerse con él como sucedió cuando llegó.

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Nadie dice que James vaya a ser titular en Balaídos después de no jugar ni un minuto en los partidos de preparación, pero un puñado de minutos en la segunda mitad sería suficientes para demostrar que el Real Madrid y Zidane le necesitan. Sin embargo, conociendo al entrenador blanco seguramente sea un Lucas Vázquez cada vez más criticado quien ocupe esa posición. James al menos ahora está convocado y si rinde a su mejor nivel podrá aprovechar la oportunidad que se le brinda para ganarse el puesto, y a Zidane.