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El encargado de llevar el caso del fichaje del futbolista francés por el FC Barcelona mientras tenía contrato con el Atlético de Madrid ha propuesto, según la información de El Mundo, cerrar el Camp Nou un partido o una multa de 300 euros.

El aterrizaje de Antoine Griezmann en la Ciudad Condal sigue llevando cola meses después de su presentación. Los rojiblancos defienden que el jugador tenia un contrato conforme su cláusula de salida era de 200 millones de euros y que los azulgrana negociaron con él antes de que esta condición bajase hasta los 120 que han terminado pagando por él.

Juantxo Landaberea, juez instructor que fue nombrado por el Comité de Competición para llevar el caso, ha propuesto dos posibles medidas punitivas para el FC Barcelona. La primera es el cierre del Camp Nou en un partido que se disputaría a puerta cerrada, algo que ya se vio hace prácticamente dos años en el choque ante Las Palmas pero por otros motivos, o una multa que resulta prácticamente una broma para una institución de la talla de la azulgrana: 300 euros.

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Esta resolución se traslada a los clubes, que deberán reunirse con el órgano mencionado y llegar (o no) a un punto en común. En los próximos días conoceremos más sobre estos dos posibles castigos, con el segundo rozando lo cómico.

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