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Durante la semana salió a la luz el caso de dopaje del ecuatoriano Michael Arroyo, futbolista del Barcelona de Guayaquil, lo que podría costarle una suspensión de por vida.

El atacante dio positivo a una prueba que se le realizó el pasado 14 de octubre, lo cual fue confirmado el martes 20 por Galo Sánchez, presidente de la Comisión Disciplinaria de la Federación Ecuatoriana de Fútbol.

Esta no es la primera vez que el sudamericano sale positivo pues en el 2007 también fue suspendido ya que utilizó sustancias prohibidas mientras militaba en el Emelec.

De cualquier forma, esto no solamente afectaría al Gambetita sino que también perjudicaría en gran forma al Club América, club con el cual ganó una Liga MX en el Clausura 2014, además de dos Concachampions en 2015 y 2016.

El nacido en Guayaquil fue pieza importante en el esquema de los azulcremas para vencer a los Tigres en la gran final de liga por marcador de 3-1 global, así que hora la FIFA y el TAS investigarán al club azteca para conocer si evitaron entregar al TAS o a la Federación Mexicana de Fútbol algún examen antidopaje del atacante y de ser encontrados culpables podrían perder su título número doce.

Hasta que se conozca a fondo si realmente cometió una reincidencia, Arroyo estará suspendido a la espera de una sanción definitiva, aunque por ahora no ha jugado ya que fue intervenido de los meniscos el pasado 8 de noviembre.

Sobre lo que está viviendo, el ex de Atlante y San Luis comentó al portal Ecuagol: “Es como si me mataran, no quiero dejar de jugar al fútbol. Siempre he vivido de esto. No hay nada de qué dudar cuando se han hecho las cosas de manera correcta. A veces no entiendo cómo tu misma gente, las mismas páginas que se identifican con el club, publican algo que aún no tiene un veredicto final, en vez de estar con el jugador y no hacer ese tipo de cosas”.

“Soy un tipo que ha trabajado tantos años y mi carrera ha estado nítida en países y clubes importantes. Eso me deja tranquilo y nos presentaremos la próxima semana (el miércoles en la FEF) con las pruebas necesarias. Estoy un poco apenado por mis hijos, porque ellos van a la escuela y todo. Tengo una madre, tengo una familia”, añadió.

Del mismo modo, su representante José Chamarro también indicó a la estación Radio Farra de Ecuador: “El doping que tiene Michael es un diurético por cálculos renales. No sé porque se está hablando de una sanción de por vida, todo eso tiene que analizarlo la comisión".

¿Qué pasará con Micky? ¿Las Águilas perderán su doceavo trofeo?


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