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Este sábado se llevó a cabo el encuentro entre Rayados y América, correspondiente a la Jornada 4 del Torneo Clausura 2019, donde los locales acabaron con el invicto del campeón así como con su racha de 23 partidos sin conocer la derrota, gracias a un doblete del argentino Rogelio Funes Mori.

No obstante, el arbitraje volvió a causar polémica en la Liga MX, ahora encabezado por Fernando Guerrero que dejó muchas dudas con su actuación en el Estadio BBVA Bancomer tras la victoria 3-2 de Monterrey.

Esto es lo bueno, malo y feo del encuentro:

Lo bueno

Las dos escuadras que se entregaron al cien por ciento dentro del terreno de juego, fuera de la polémica, el estilo de juego del uruguayo Diego Alonso y Miguel Herrera ofrecieron a dos cuadros meramente ofensivos sin la intención de regalar nada dentro del terreno de juego, lo cual demostró porque era el duelo más llamativo de toda la jornada.

El segundo tanto de Rogelio Funes Mori es para verlo miles de veces ya que demostró su gran control de la pelota y facilidad para quebrar dejando en el suelo a Edson Álvarez y Paul Aguilar, además del gran centro que le brindó el canterano Edson Gutiérrez, que entró de cambio en el segundo tiempo.

La utilización de jóvenes canteranos por parte de las dos instituciones, pues la regla 20/11 sigue ayudando a que surjan nuevos talentos pues aunque sean pocos minutos por parte de los albiazules seguimos viendo a Carlos Rodríguez, Jonathan González, Edson Gutiérrez y Johan Vásquez mientras por los azulcremas están Antonio López y Fernando González.

El lleno que hubo en el Gigante de Acero es para aplaudir, la mejor afición del país se hizo notar de inmediato cada que Agustín Marchesín tenía la pelota, un factor importante para la victoria que logró el conjunto de la Sultana del Norte.

Lo malo

El adiós al invicto del campeón de laLiga MX que no pudo llevar más lejos su cometido ,pues los pupilos de Herrera querían alcanzar la marca de Mario Carrillo, pero 23 no está nada mal y ahora solamente se enfocarán en lograr el bicampeonato y el doblete de liga y copa.

La rápida lesión del jovencito López, pues apenas había ingresado en el tiempo complementario y unos minutos después tuvo que abandonar el césped.

El cuarto asistente parece que solamente está en el terreno de juego como utilería, pues El Piojo se acercó a la pantalla del VAR en todas las jugadas de revisión para ver las jugadas y decirle al juez central que hacer cuando eso está estrictamente prohibido, además debieron amonestarlo por eso y jamás le sentenciaron nada.

La expulsión de Avilés Hurtado cambió el rumbo del partido pues apenas al minuto 7'. El Cantante decidió echarlo aun cuando vio el VAR, pues desde su criterio pisoteó al guardameta americanista pero claramente no llevaba esa intención pues los exsilbantes que analizaron el duelo contradijeron su decisión y desde ahí se vino todo para abajo.

El estado de la cancha no dejó que el balón circulara de la mejor forma pues la lluvia azotó de manera muy fuerte y causó que en ocasiones los futbolistas se resbalaran, afortunadamente no hubo ninguna catástrofe.

Lo feo

Un arbitraje de vergüenza. Cuatro expulsiones injustas, la de Avilés Hurtado, Jorge Sánchez y Nico Sánchez, un penal regalado a Monterrey y con amonestación a Emmanuel Aguilera incluida, la cual llevó a una eventual expulsión.

En el segundo tiempo dejó pasar algunas jugadas que eran de tarjeta roja y amarilla donde estaban involucrados Edson Álvarez, Bruno ValdezLuis Reyes, Jesús Gallardo y Guido Rodríguez; pudo haber revisado en el VAR en más ocaciones para hacer más justo todo. Así como un penal no marcado de César Montes sobre Roger Martínez, el cual hubiera significado el 2-2, y el golazo de Funes Mori no hubiera existido. Desde temprano se le fue todo de las manos al árbitro Guerrero y por ende, el partido se volvió un constante de reclamos entre jugadores y cuerpo técnico que se desquiciaron a lo largo de los 90 minutos.

Los árbitros siguen teniendo el orgullo demasiado alto para revisar el VAR, pues prefieren apegarse a sus erróneas desiciones a marcar justamente. Sin duda el presidente de la comisión de arbitraje, Arturo Brizio, tiene mucha chamba para corregir estas barbaridades que no dejan de suceder jornada a jornada.


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