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Tras más de un año en Europa, Hirving Lozano ha tenido una explosión descollante en la Eredivise con el PSV. Por ello, el canterano del Pachuca ha levantado grandes expectativas con respecto a su futuro próximo en el balompié del Viejo Continente. Considerando sus apenas 23 años, el 'Chucky' podría firmar una carrera larga y exitosa en el mejor fútbol del mundo pero... ¿Le alcanzará para rozar los estándares que lograron Hugo Sánchez, Rafael Márquez y el mismo Javier Hernández?

La realidad es que responder esa interrogante se antoja complejo porque hay tantos datos alentadores como realidades duras. Para empezar Lozano, a diferencia de los tres jugadores mencionados, está comenzando su carrera en una liga de menor nivel (quizá apenas equiparable con la Ligue One). Esa es una carta que le juega a favor y en contra al extremo azteca.

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A favor porque su adaptación al fútbol ibérico - como está sucediendo - ha sido fabulosa en un equipo donde es protagonista, incluso la figura. Un poco en contra porque las diferencias de nivel entre la competitividad a la que se juega en el campeonato local en comparación con las competencias europeas es muy grande, e Hirving lo ha resentido en su primer incursión en la Champions League.

Esto último ha implicado que, pese a lo bien que ha aterrizado en Holanda, Lozano aún no ha demostrado los méritos suficientes para calzarse la casaquilla de alguno de los gigantes de Europa. Sin embargo, eso no implica que no lo vaya a hacer en algún futuro. El chico tiene todo un futuro por delante y manteniendo el ritmo que lleva en la Eredivisie es cuestión de tiempo para que emigre a otra liga de mayor exigencia.

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Luego está otro tema que le juega un poquín en contra. En el fútbol actual, el perfil de jugador que constituye el 'Chucky' (extremo veloz, atacador de espacios) es uno de los más prolíficos en los grandes clubes. Digamos que su posición está usualmente bien cubierta en los equipos más jugones de Europa, así que tiene que desarrollarse realmente bien para obtener una chance como la que en su momento tuvieron Hugo, 'Chicharito' y Márquez en el Madrid y el Barcelona.

Y ahora mismo, hablando plena y absolutamente del presente, el ex Pachuca tiene un aspecto en el que trabajar bastante. Si bien ha mejorado una enormidad su golpeo de balón y su toma de decisión en el PSV, su regate y utilidad atacando en estático (es decir, cuando el equipo contrario está completamente replegado, sin espacios para correr) aún deja que desear. Por ello no ha sido extraño ver que en ciertos contextos la escuadra holandesa ha buscado dejarlo 'aislado' a la espera de un contragolpe y no más. Su aporte en otras facetas del juego debe ser mayor.

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Cuando se trata de atacar ante rivales replegados, en Europa, Hirving no ha tenido el mismo éxito que atacando los espacios o corriendo a la espalda de los contrarios. Claro que puede desarrollar su carrera siendo un jugador meramente de espacios, pero sí de verdad quiere trascender deberá mejorar su regate en corto y ante defensivas bien ancladas. Eso le dará un plus que no todos los jugadores de su perfil poseen.

Al final, con poquito más de un año de carrera en Europa y 23 de edad, es muy pronto para decir que Lozano será (o no) una leyenda mexicana en el Viejo Continente. Hay cosas que debe trabajar y otras que desde ya entusiasman mucho. Aunque si mantiene el paso que lleva y las lesiones lo respetan, estamos ciertos en que logrará una carrera larga en el fútbol europeo y, además, dará más alegrías de las que ya ha dado a la selección mexicana.