Skip to main content

Al Barça le faltó algo de pegada en ataque pese al gol de Messi tras pase de Iniesta, pero lo que mejor hizo fue la distribución del balón. Conte planteó un partido en el que los locales esperaron en su campo al rival y eso posibilitó el 70% de posesión y que los centrocampistas del Barça, en especial Sergio Busquets, se hinchasen a dar pases.

Y es que el mediocentro de Bahía incluso hasta batió un récord en este aspecto del juego. Busquets hizo un total de 139 envíos a sus compañeros, de los cuáles finalmente encontraron su destino 128. Esto supone un porcentaje de acierto del 92%. Hasta ahora ningún jugador del Barça había dado tantos pases en toda la temporada.

El precedente más cercano que había hasta la fecha era el de los 111 pases de 114 intentos que consiguió el recién llegado Paulinho en el partido de la fase de grupos ante el Olympiacos griego.

Además, hay que destacar que de esos 139 desplazamientos de Busquets, 49 fueron en campo propio y 90 en campo contrario, lo que añade más mérito a la proeza que consiguió el futbolista blaugrana. Busquets también dio hasta 152 toques de balón, lo que significa que casi todos sus pases fueron al primer toque, mientras que terminó robando 10 balones al rival, una cifra que refleja también la capacidad del jugador sin balón.

Con estos datos encima de la mesa es normal que la prensa de todo el mundo alabe al centrocampista del Barça. Incluso las leyendas inglesas Ferdinand, Lampard y Gerrard se deshicieron en elogios hacia Busquets en el post partido de la cadena británica BT Sport.