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El partido entre el Chelsea y el Barça de Champions League del pasado martes dejó muchos detalles, como por ejemplo el primer gol de Messi al conjunto inglés en toda su carrera o la actuación de Willian, que marcó un gol y dio dos balones al palo. Pero hubo uno que se produjo inmediatamente antes del encuentro y que pasó completamente desapercibido.

Y es que cuando los capitanes se dirigen a saludarse y a dar la mano al trío arbitral es habitual que se intercambien los banderines de uno y otro equipo en señal de respeto y 'fair play'. Sin embargo, el banderín que portaba Andrés Iniesta antes de dárselo a Azpilicueta contenía un gazapo de lo más insólito.

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Como se puede ver en la imagen, en el bordado pone que el encuentro que tuvo lugar era de dieciseisavos de final de la Champions League, cuando realmente la eliminatoria era de octavos de final, ya que el actual formato de Liga de Campeones no contempla los dieciseisavos como ocurre en cambio en la Europa League.

Otro detalle que en esta ocasión no pasó desapercibido durante el partido fue la imagen de Jordi Alba y Luis Suárez retorciéndose a la vez en el suelo tras recibir una falta del rival. Una foto que ha sido 'carne de meme' por las sospechas de que ambos futbolistas estaban tratando de perder tiempo.