El 'nuevo ADN' del Leverkusen asegura una victoria tardía en el debut de la Bundesliga
A pesar de haber tenido una ventaja de dos goles, el equipo de Xabi Alonso se vio obligado a remar contra la corriente cuando el Gladbach logró empatar. Sin embargo, un penalti en los últimos momentos permitió a Florian Wirtz sellar la victoria tras convertir el rebote de su tiro inicial, que había sido parado por el arquero rival.
Este partido marcó el 12° gol de empate o ventaja anotado por Leverkusen durante el tiempo de compensación en la segunda mitad desde el inicio de la temporada pasada. Granit Xhaka destacó la mentalidad del equipo, afirmando: “Quizás esta sea nuestra nueva DNA... no importa cómo jugamos, creemos hasta el final”. El centrocampista se sintió satisfecho de llevarse los tres puntos a casa y reafirmó la importancia de la actitud del equipo en momentos críticos.
Xabi Alonso, por su parte, reconoció que el equipo no puede entrenar la habilidad de marcar goles en los últimos minutos, ya que esto proviene de la mentalidad del grupo. En el partido, Xhaka abrió el marcador con un impresionante gol desde 25 yardas, seguido de otro tanto de Wirtz. Sin embargo, el Gladbach reaccionó y logró igualar el encuentro, lo que llevó a una conclusión trepidante.
A pesar de la victoria, Alonso expresó la necesidad de mejorar, ya que momentos de pasividad durante el juego les costaron en ciertos momentos. Subrayó que deben ser más agresivos y compactos en el campo, mientras que la afición mostró su apoyo, aunque hubo un breve parón debido a las bengalas encendidas en las gradas. Esta victoria prolonga la racha invicta de Leverkusen en la liga a 35 partidos.